1- Háblenos de usted, ¿cómo relata su día a día?
Como el de cualquier trabajador de la vida urbana moderna. Ajetreado, lleno de proyectos y de ambiciones que se diluyen si uno no sabe gestionar su tiempo, el oro de nuestros días.
Trabajo como CAD Manager en una gran empresa dedicada a la Ingeniería Civil, donde el trato con profesionales de diversas disciplinas, resulta muy positivo para mi propio crecimiento como persona, ya que resolver los problemas de otros, inventando soluciones o solucionando invenciones, ayuda mucho a la hora de labrarse una mente analítica y estructurada.
Por supuesto, el ejercicio de lo sensual, del amor y como no, de lo físico, resulta imprescindible para que todo, la vida y las ideas, fluya armonioso. Algo que siempre tengo en cuenta, y claro está, procuro, como decía el poeta alejandrino, atrapar las palabras en cualquier sitio, en cualquier momento, para no dejarlas escapar, y más tarde sacarles el fruto que son mis escritos.
2- ¿Por qué comenzó a escribir?
Cuando era pequeño me intoxiqué con la tinta negra de los libros prestados que leía, por eso desde la juventud me he visto irremediablemente empujado a escribir. Como si se tratara de la sintomatología de alguna enfermedad.
3- ¿Cómo retrata la literatura en el siglo XXI?
Creo que en cada siglo se asiste al final de los grandes modelos literarios establecidos, y por tanto, al nacimiento de nuevas formas de entendimiento, de nuevas maneras de escribir, de nuevos talentos que nacen o se consagran, pero siempre mirando el camino recorrido por los anteriores.
4- ¿Se considera un(a) escritor(a) exitoso(a)?
Creo haber saboreado el éxito al encontrarme ante un auditorio que me escucha recitar poesía.
5- ¿Cómo evalúa su trabajo en los últimos años?, ¿qué opinan sus amigos sobre su trabajo?
Acabo de terminar un libro llamado “Humana Matemática” que pretendo enviar a ciertos certámenes para probar suerte. Aparte estoy escribiendo una novela negra, enmarcada dentro del realismo feroz del que todos tratan de huir hoy día.
Siendo sincero, mis amigos me piden constantemente un libro que comprar para tenerme cerca, un libro que pueda firmarles. Creo estar valorado en este sentido, pero el público en general está cada vez más acostumbrado a los guiones cinematográficos.
6- ¿Qué ha hecho para mejorar sus trabajos?
Seguir leyendo, seguir escribiendo, seguir pidiendo críticas constructivas.
7- ¿Ya participó en algún concurso literario? ¿Cuál?
Participé en algunos, he sido finalista con buenas críticas y publicado de esta forma en el Certamen Plumier de Versos, por eso ahora intento repetirlo, creo que enviaré mi último poemario a varios certámenes conocidos que siempre me han llamado la atención.
8- Dénos su opinión con relación al nuevo formato que EMOOBY utiliza.
Pienso que la gente se acerca cada vez más al formato digital, pero me parece que si un libro en formato clásico, en papel, necesita de una promoción, presentaciones, firmas, etc., el libro digital necesita renovar algo de esto también, no solo el soporte físico.
9- ¿Qué evaluación hace de las nuevas tecnologías y de la transformación del libro en los tiempos de hoy?
Soy un Programador Real. La informática aplicada es mi trabajo, mi sustento y una de mis principales pasiones, pero pienso que la transformación debe venir acompañada de una multiplicidad de cambios, no solo estéticos o acomodaticios.
10- ¿Alguna vez había pensado publicar en formato virtual?
No pensé nunca en publicar de esta forma, la verdad.
11- ¿Qué le llevó a publicar con EMOOBY?
Me ofrecieron ventajas interesantes, promoción y ayuda, cosas importantes para quien se adentra en el territorio difícil de sus primeras publicaciones.
12- ¿Qué opina sobre el trabajo y desempeño de EMOOBY?
Me parece una editorial con mucho interés por los nuevos valores de la literatura emergente, que realiza una labor de búsqueda de los mismos, sin esperar a que éstos se debatan en la indecisión de presentar sus obras, lo que supone una señal, a mi entender, de encontrarse en el buen camino.
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